Josep Maria Subirachs

En el alfabeto simbólico de Subirachs, “Cap, cor i carn” definen la totalidad del ser humano, coincidiendo con las tres partes del alma de Platón.

Para simbolizar la mente, el corazón y el sexo, Subirachs introdujo tres triángulos equiláteros, unas formas geométricas que se convirtieron en elementos sígnicos.

Josep M. Subirachs (Barcelona, 1927-2014) fue un escultor de prolífica y dilatada trayectoria. La obra pública y monumental —su verdadera vocación— es la que le valió el reconocimiento público y la que consolidó su prestigio. De entre las numerosas obras monumentales que realizó destaca, por su fama internacional, el conjunto escultórico de la fachada de la Pasión de la Basílica de la Sagrada Familia. Su amplia y variada producción incluye, además, dibujos, pinturas, grabados, litografías, carteles, tapices, escenografías así como diseños de joyas y de medallas. Escrupulosidad formal, dominio de la técnica y yuxtaposición de materiales y modelos definen la obra de Subirachs. Su universo iconográfico, personal e inconfundible, con un trasfondo cultural rico en referencias simbólicas y en recursos plásticos y conceptuales, es la esencia que distingue la producción de uno de los más representativos exponentes del arte catalán de la segunda mitad del siglo XX.
Subirachs, al representar e interpretar Atenea, hace ya más de 20 años, lo asocia a la inteligencia sirviéndose de una figura que se ha convertido en parte integrante de su iconografía personal. Esta colección antaño diseñada por Josep Maria Subirachs se ha podido realizar hoy día gracias a la colaboración de sus descendientes, en especial de Judit Subirachs, historiadora del arte especializada en la obra de su padre, y directora del recién inaugurado Espai Subirachs.

Escultura
eqüestre

Colección Atenea